Dicho así seguro que muchos no me
entenderán, aunque por mi experiencia personal puedo afirmar que ser
monárquico o republicano no es de derechas ni de izquierdas ni de
centro, va en la persona.
Mientras que Rota está metida en plena
pre-feria, algunos se empeñan en recordar cosas muy muy pasadas, y
para mi punto de vista, nefastas, y si, me refiero a la época
histórica de la Segunda República. Algunos, sin haberla vivido,
añoran esa época, y yo me pregunto ¿Qué añoran? ¿Añoran como
las fuerzas del orden detenían a políticos opositores? ¿Añoran
las persecuciones religiosas y quemar iglesias?¿Añoran los campos
de concentración? ¿Añoran como el Gobierno republicano regalo
nuestros fondos de oro a los Rusos comunistas?¿Añoran la represión
asturiana donde los militares mandados por la República mataron a
los huelguistas mineros?... Claro que en la Segunda República se
hicieron cosas bien, pero justificar eso es como justificar la
Dictadura de Franco por que durante la Dictadura se hicieron pantanos
o se instauró la Seguridad Social. Hay cosas indefendibles.
Pero muchos, en su legítimo derecho,
defienden la república como modelo de estado, y hay que diferenciar,
durante la primera república la bandera fue de los mismos colores
que tenemos ahora mismo. La bandera tricolor con la franja morada
abajo no simboliza la república, simboliza sólo y exclusivamente a
la Segunda República, y o bien el que la porta no sabe realmente lo
que simboliza, o es que algunos quieren justificar una época
manchada de sangre, miedo y represión.
Volviendo al título del artículo, yo
creo realmente que la izquierda española cada vez es más
monárquica, y a hechos me remito. La principal reivindicación de
los republicanos es que el Rey no es elegido por el pueblo. Llevan
razón, pero ¿Saben ustedes quienes tampoco son elegidos por el
pueblo? Los alcaldes, los diputados de las Diputaciones, los
presidentes de Diputaciones, los presidentes de las Comunidades
autónomas, los presidentes del Congreso y el Senado, el Presidente
del Gobierno y sus ministros... todos estos no son elegidos por el
pueblo ya que, la sociedad votamos unas siglas y no a las personas.
Me explico un poco más y uso un
ejemplo cercano. El podemista y afamado republicano Alcalde de Cádiz,
el Kichi (sin entrar en si influyó o no el ser el novio de la líder
andaluza de Podemos Teresa Rodríguez para ser elegido candidato a la
alcaldía) fue elegido Alcalde por los Concejales del Ayuntamiento
gaditano, no por los ciudadanos, los gaditanos votaron una lista
electoral cerrada de un partido político, luego, esos Concejales
electos eligen al Alcalde que a ellos les da la gana.
Pero me voy a otro ejemplo, los
Diputados nacionales. En cada provincia nosotros votamos la lista de
un partido político, lista cerrada y bloqueada. Luego, los diputados
electos en el Congreso, de un partido u otro, eligen al Presidente
del gobierno. La sociedad no elegimos al Presidente del Gobierno, lo
eligen los partidos y sus diputados. Y luego, para más colmo, el
Presidente electo elige a dedo a sus ministros, que pueden ser
políticos o no.
Y luego tenemos otros casos mas
alarmantes, mientras que algunos defienden el sistema republicano
como modelo de estado, la socialista Susana Díaz enchufó a su
marido en los cursos de formación de UGT, también tenemos el caso
del que fuera Eurodiputado de Izquierda Unida, Willy Meyer, que
enchufó a su hija en la Junta de Andalucía, y un poco mas reciente
tenemos al marido de Ada Colau enchufado en el Ayuntamiento de
Barcelona, la ex novia de Pablo Iglesias enchufada como Diputada
nacional o el sobrino de Manuela Carmena, enchufado también en el
Ayuntamiento de Madrid.
¿Y todos estos políticos atacan a la
Monarquía por que se hereda de padre a hijo? JA JA JA
Yo siempre me he autoproclamado
progresista, y para mi progresista no es mirar para atrás en la
historia constantemente, progresista es predicar con el ejemplo.
Blog personal donde vuelco lo que pienso y donde comparto mis publicaciones semanales en Viva Rota.
jueves, 14 de abril de 2016
miércoles, 6 de abril de 2016
REGENERARSE
Recuerdo cuando hace ya más de tres meses recorría con mis compañeros los colegios electorales de Rota, una señora muy amable que salía después de ejercer su derecho, nos dijo “Os he votado”.
Tuvimos una buena charla con esta señora, nos expuso los motivos por los que nos había votado, y al despedirse nos dice con una cara muy pícara “Suerte, a ver quien gana, pero vamos, que después ninguno dice que ha perdido”...
A los políticos nos gusta mucho oír a la gente, pero nos cuesta mucho escuchar, por eso en UPYD hemos tomado nota de lo que la sociedad nos ha dicho. Hemos sido los primeros, y los únicos, que la noche de las elecciones dijimos que los resultados eran malos, muy malos, pero no solo hemos admitido los resultados tal como son, sino que ya hemos tomado medidas.
Este sábado pasado celebramos en el Partido nuestro Congreso extraordinario, no ha sido fácil llegar hasta aquí, han sido meses convulsos en los que hemos sido portada y no por cosas positivas, es más, yo diría que hemos tenido mas portadas de prensa después de las elecciones que antes, pero bueno, lo que está claro es que no existen cambios fáciles, y en UPYD ya hemos demostrado varías veces que lo difícil no nos asusta.
Pero ya eso quedó atrás, hemos hecho lo que la gente nos ha pedido, nos hemos regenerado. Ahora toca afrontar cambios mirando al presente y al futuro, pero orgullosos del gran trabajo que todos, y digo todos, nuestros cargos públicos han hecho en el pasado. Me da igual si algunos de los nuestros ahora están en otros partidos, la labor que hicieron bajo las siglas de UPYD fue un trabajo de equipo, y el trabajo que han hecho todos los que nos han representado es motivo de orgullo. No se puede mirar al futuro si no se reconoce el pasado ya que él nos indica de donde venimos, algo fundamental para saber donde queremos ir.
Muchas veces he dicho que la política necesita transparencia, pero también necesita honestidad y juego limpio. Y esto es lo que pide la gente, y hay que saber escucharlos, y con esto me refiero al tema del que vengo hablando desde la noche electoral y que tenemos día si y día también en los telediarios. No creo, bajo ningún concepto, que un partido que ha perdido las elecciones y que ha sacado su peor resultado de los últimos 30 años, asuma el Gobierno, me da igual que sea legal o no, cuando uno pierde debe mirar hacia dentro, admitir la derrota y hacer propuesta de enmienda. Y bueno, del que apoya a los perdedores ya ni hablo...
Por eso en UPYD nos hemos regenerado, por que somos necesarios, porque las ideas que defendemos siguen necesitadas de ser defendidas, porque somos honestos y hacemos lo que decimos. Hemos cometido errores, y aunque aprendamos de ellos seguro que cometeremos errores nuevos, pero gracias a estas elecciones generales hemos aprendido a escuchar, y eso es lo que pide la gente, ser escuchada.
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