ENTRE MEDALLAS Y BARROTES.

ENTRE MEDALLAS Y BARROTES.

Llevamos lo ciudadanos una época bastante movida en lo respecto a la actualidad política. Lo último de lo que somos conocedores es que un ex-Consejero de la Junta de Andalucía ha dado con sus huesos en prisión, otro más que sumar a la ya demasiado larga lista de políticos imputados o condenados por un presunto mal uso de sus cargos públicos.

Esta noticia, de extrema gravedad para los andaluces que somos los principales perjudicados y para la sociedad en general, ha tapado la otra noticia política de actualidad, de menor gravedad pero que también es bastante escandalizante, el Ayuntamiento de Madrid concede la medalla de Honor de la Ciudad de Madrid a su anterior Alcalde y actual Ministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón.

Sinceramente creo que en este país se ha perdido el norte, hemos llegado a un punto político en el que creo muy firmemente que el rojo y el azul, el psoe y el pp, son cada vez más parecidos, por una parte Mar Moreno, actual miembro del Gobierno de la Junta de Andalucía, defiende a su compañero socialista que acaba de ingresar en prisión por orden de la Juez Alaya, reconociendo su trabajo al frente de la Consejería de Empleo; y por otra parte tenemos a la actual Alcaldesa de Madrid, Ana Botella (no votada por los madrileños) que ha tenido la celebre idea de conceder la medalla de Honor de la Ciudad de Madrid al Alcalde que le cedió el sillón sin pasar por las urnas, Alberto Ruiz Gallardón.

Esto de dar homenajes a los políticos ya es muy antiguo, y siempre sospecho que hay algo detrás que no nos quieren contar, porque digo yo, si los cargos públicos cobran por estar ahí, ¿por qué se merecen homenajes? ¿no son más merecidos esos homenajes aquellas personas o instituciones que, de forma altruista, ayudan a los demás? Al fin y al cabo, el tener un cargo público, ya sea como Concejal o como Alcalde o Alcaldesa ya está remunerado y se le paga para ello, para que hagan bien su trabajo, y los ciudadanos en vez de premiar que trabajen bien deberíamos exigirles que lo hagan bien, pues para eso les hemos votado.

Alberto Ruiz Gallardon ha dejado una Ciudad como Madrid con una deuda de más de 6 mil millones de euros, casi 7 veces la deuda de la ciudad de Barcelona ¿esto se merece la medalla de honor de la Ciudad? ¿El despilfarro y el derroche merece ser homenajeados?

Me imagino al ciudadano de a pie, ese que está asfixiado por los recortes, los impuestos y la crisis, que ve un día el telediario y ve que se le da una medalla de honor al Alcalde que ha despilfarrado el dinero de sus ciudadanos, y que en el otro lado político un alto cargo de la Junta de Andalucía defiende a un Consejero que ahora está en la cárcel.¿De verdad nos extrañamos que cada vez más ciudadanos vean a la clase política como un problema?

NO EN MI NOMBRE

NO EN MI NOMBRE

La semana pasada una homilía de un sacerdote madrileño, levantó y sigue levantando toda clase de ampollas e iras por gran parte del sector de la sociedad. Para los que no sepáis a que me refiero os pongo en antecedentes, el Obispo Reig Plá, en su homilía semanal, comparó la homosexualidad con los abusos laborales y las drogas, diciendo que era una enfermedad y un problema de la sociedad.

Nadie le ha dicho al Sr. Reig Plá que el problema para la sociedad son las personas como él? Como se atreve una persona, en pleno siglo XXI, en una época en la que debemos de enseñar que todos somos iguales, hacer este tipo dediscursos?

Desde pequeño a mi me han enseñado, tanto mis padres como en el colegio salesiano que me eduqué, que todos somos iguales, que el voluntariado es la mejor forma de ayudar a los más desfavorecidos por que todos somos iguales, y que las misiones y los millones de misioneros cristianos que están por todo el  mundo ayudan a todos los que lo necesitan, cuidando, asistiendo y dando de comer a millones de personas cada día sin mirar su sexo ni su color de piel, en definitiva, sin hacer distinciones de ninguna clase. Entonces este Obispo madrileño, a que está jugando? Qué se cree, superior?

Estamos en el 2012, y en una sociedad cada vez más dividida por ideologías y empeñados en remarcar lo que nos diferencia entre nosotros en vez de ver lo que nos une,deberíamos todos, incluyendo los representantes de la Iglesia,abogar por la libertad e igualdad de derechos y deberes.

Nadie tiene derecho a insultarnos o faltarnos el respeto cuando decidimos salir en una estación dePenitencia  con  nuestra hermandad o de ir los domingos a misa, pero tampoco podemos consentir que una persona, en este caso Obispo de la Iglesia Católica, falte el respeto a miles y miles de ciudadanos que tienen el derecho de acostarse o casarse con quien ellos quieran, al igual que el resto de ciudadanos. La homosexualidad no es una enfermedad ni nada por el estilo, es una decisión personal de cada uno y que debe ser respetada por todos, y si un Obispo no lo piensa así, por lo menos que tenga la educación y el respeto de no decirlo en una homilía pública, intentando sembrar el odio y la marginación en el seno de la sociedad, o por lo menos que no lo haga en nombre de la Iglesia Católica, ya que yo también formo parte de la Iglesia como creyente y para nada pienso igual que este hombre, al revés, no comprenderé la decisión de la Iglesia Católica si mantiene comoObispo a este tipo de personas.

La intransigencia es una enfermedad de la sociedad y debemos combatirla entre todos, y no debemos permitir que ni el machismo, ni el feminismo, ni la homofobia tome la palabra en ningún ámbito de la sociedad.

YA EMPEZAMOS

YA EMPEZAMOS

En esta semana, que empieza de una forma muy pesimista, cargada de recortes y sablazos, con unos Presupuestos Generales del Estado que han sido presentados no sólo con una clara intención electoralista por haberse dado a conocer después de las elecciones en Andalucía, sino que también se han hecho de espaldas a los ciudadanos aprovechando un gran puente festivo que es la Semana Santa y que la mayoría de todos nosotros desconectamos un poco de todo lo que nos rodea , para dar a conocer estos Presupuestos Generales a la ciudadanía.

Si no tuviese bastante con todo lo comentado anteriormente, en la mañana del miércoles escucho a varios miembros del Gobierno, personas que deben considerarse respetables al ser Ministros y tener grandes cargos en su partido, decir que estos duros recortes han tenido que tomarlos por que “la herencia recibida les ha obligado”; vamos a ver, cuando el Partido popular se presentó a las elecciones generales del pasado mes de noviembre, con un programa electoral y una serie de ideas de gobierno para España, no sabían en que situación nos encontrábamos? Que pasa que Rajoy vive como Homer Simpson en el país de la fantasía y las piruletas ajeno a la realidad?

Por favor, ya está bien de engañar a los ciudadanos, los votantes del pp han confiado en ellos para gobernar y no para hacer oposición a la oposición, ya está bien de echar escusas para justificar decisiones o actuaciones, ese es un truco muy viejo y los ciudadanos, que somos los que realmente estamos sufriendo esta crisis, nos merecemos unos políticos que gobiernen y que no se dediquen a decir siempre “...y tú más”.

España y los españoles necesitamos soluciones, está claro que la malísima gestión de Zapatero ha sido un regalo envenenado al Gobierno de Rajoy, pero eso no es escusa para que el pp no haga las reformas que, de verdad, necesitamos, como la reforma de las Comunidades Autónomas eliminando duplicidades, como la supresión del cupo vasco y navarro, como el cierre de embajadas autonómicas por todo el mundo, como los sueldazos de los ex-presidentes, como estudiar la eliminación de las Diputaciones provinciales, como la supresión de subvenciones a partidos políticos, sindicatos y patronal...

En poco más de tres meses el pp ha defraudado a un gran sector de sus votantes, espero por el bien de todos, que el pp no cometa los mismos errores que el psoe en su etapa de gobierno, espero que un partido con la grandeza que tiene el Partido popular sepa admitir errores y corregirlos, al fin y al cabo, estamos en sus manos.

SEMANA SANTA

SEMANA SANTA

Ya empiezan a sonar los primeros sones de la banda de música, ya asoma por la puerta de mi capilla la manigueta, señal de que el paso está asomándose a la calle, ya hace rato que la cruz de guía paso a mi lado y la especial y única fragancia de incienso recorre la calle y me traslada a esa época, no hace tanto, que de la mano de mi abuelo nos emocionábamos viendo a mi hermandad, a nuestra hermandad, bendiciéndonos a su paso.

Ya sale, ya está fuera, veo asomarse la mano de mi virgen, temblorosa pero firme a la luz del día y, casi sin darme cuenta ahí está, es ella, mi Virgen, la madre de todos nosotros, la que nos ayuda y nos socorre cuando la necesitamos, la que nunca se cansa de escucharnos y la que nunca nos abandona, ella que ha acompañado al cielo a tantos seres queridos que ahora recuerdo, ella ya esta en la calle con los suyos.

Al ritmo señorial del himno español empieza a virar el paso llevado por los costaleros, la luz de esta mañana entra por el palio e ilumina su cara haciendo brillar sus dolorosas lagrimas que ella derrama por todos nosotros, el cielo despejado ayuda a que la Virgen esté más bonita que nunca y ese rostrillo blanco, puesto con cariño y amor por los suyos, la hacen brillar, más si cabe, con luz propia.

El son de los costaleros la traen hacia donde yo estoy, parece que camina, paso a paso mi Virgen viene hacia mi y aumenta mi pellizco en el estomago, un aire frío por la espalda hace que se me erice la piel y que mi cabeza se llene de recuerdos y plegarias, mi mente y mi corazón piden perdón en silencio por todo lo que sé que está mal, pero las lagrimas que de mi florecen me hacen entender que ella me perdona y que ella esta ahí, frente a mi, perdonándome y acompañándome en esta vida que cada día doy gracias por vivir. Sus ojos me miran y mi cuerpo se estremece de emoción al contemplarla tan de cerca, parece que me habla y en efecto así es, siento como me consuela y me dicen que los míos, los que se me han ido están bien y me acompañan día a día. Con tanta gente que nos rodea parece que estamos solos, ella y yo, sin nadie más, ese momento no lo cambio por nada, ese momento es sólo nuestro.

Empieza a alejarse lentamente, doy gracias a Dios por haberla visto otro año más en la calle y pido salud para poder verla de nuevo el año que viene, contengo mis ganas de gritarle a sus costaleros que no se la lleven, que la aguanten un poco más cerca mía, pero no me sale ni la voz, las lagrimas me mantienen en silencio.